Energías renovables: de la simulación a la realidad

Los recursos naturales, como el viento y el sol, son fuentes inagotables de energía y desde el punto de vista medioambiental poseen muchos beneficios. “Sin embargo, cuando se quieren implementar, las energías renovables presentan inconstancia e imprevisibilidad” señala el doctor Diego Feroldi, que fue repatriado en el año 2009 gracias al Programa de Recursos Humanos PRH 24 y actualmente trabaja en el Centro Internacional Franco Argentino de Ciencias de la Información y de Sistemas (CIFASIS CONICET-UNR-AMU) junto al doctor David Zumoffen y el becario doctoral Pablo Rullo.

Para suplir la intermitencia de los recursos no contaminantes, Feroldi menciona que una opción viable son los sistemas híbridos compuestos por fuentes de diferente índole que alimentan una carga y en donde un sumador va agregando toda esa energía. Este sistema estaría alimentado por energía solar, eólica y por  pilas de combustibles, dispositivos electroquímicos que producen electricidad continuamente, siempre que reciban hidrógeno. 

“El método más usual de producir hidrógeno requiere utilizar gas natural, proceso que implica contaminación. Otra forma de generarlo es mediante la  incorporación al sistema multi-fuente de un tanque suministrador de bioetanol, combustible derivado del alcohol, que se transformaría en hidrógeno y luego ingresaría a las pilas de combustible. Este dispositivo funcionaría como un respaldo para cuando las energías renovables falten y evitaría sobredimensionar todos los otros sistemas” señala Feroldi al respecto de esta tecnología con alta eficiencia y bajo impacto ambiental en la que trabajan.

Otra forma de producir hidrógeno es a partir de agua, proceso denominado electrólisis, que estudia el becario Pablo Rullo. “Combinar electrólisis con energías renovables, permitiría almacenar la energía que sobra en forma de hidrógeno y reemplazar el uso de la red de centrales térmicas” explica Feroldi. 

Avances y futuro de la investigación

“Nuestro grupo trabaja con modelos dinámicos de simulación, etapa previa a lo que en un momento final sería la implementación. La simulación con modelos matemáticos otorga grandes posibilidades de hacer cálculos y ensayar con escenarios muy diversos  rápidamente, que con el sistema real sería muy difícil o muy costoso. Tener un modelo bastante similar a la realidad da grandes oportunidades de hacer pruebas, cálculos y diseño” cuenta Feroldi.

Al respecto posibles aplicaciones futuras del sistema híbrido multi-fuente, el doctor Feroldi indica “Cada vez toma mayor preponderancia el paradigma de generación distribuida, es decir, que la generación se encuentre desparramada geográficamente cerca de los consumidores, para evitar pérdidas energéticas que se producen actualmente, por ejemplo, en el transporte de electricidad. De momento estamos pensando en una generación estacionaria, es decir, alimentar una carga estática, que dependiendo de la escala podría ser una casa, una fábrica o un pueblo que no tengan conexión a la red eléctrica”.