Se conocieron más detalles del crimen de Ceres

Al describir a su hija, señaló que se trataba de una chica familiera, con muchas amigas, amable y que no tenía ningún problema con ellos (sus padres). Por eso cuando desapareció, desde un principio sostuvo que no se debía a un acto de rebeldía, ya que incluso el mismo día de la desaparición, antes de retirarse de su casa, le había pedido permiso a su madre. José reconoció que no sabía que su hija se dirigía al corralón donde finalmente fue asesinada, ya que le había dicho que “iba de un amigo a bajar unas cosas para el celular”. “Nos mintió porque nosotros no queríamos la relación con este muchacho (aparentemente su novio)”. Recordemos que una de las versiones es que María Fernanda creía que se iba a encontrar con él, luego de que recibiera un mensaje engañoso por parte de quien terminaría siendo su agresora. El padre calificó de “un chanta terrible” al novio de su hija, señalando que tiene entre 24 ó 25 años y que nunca trabajó. Contó que hace dos años atrás cuando empezó a salir con María Fernanda, desde el principio a ellos como padres no les gustaba la relación, pero decidieron aceptarlo para no ir en contra de su hija. “Luego el muchacho empezó a andar con la agresora (Karen Ñ.); nosotros lo descubrimos hasta que le hicimos ver a ella (María Fernanda) que no tenía que estar con él y lo corrimos de la casa”, explicó. Y si bien estuvieron un tiempo distanciados, aparentemente hacía un año que se veían a escondidas sin que los padres supieran lo que estaba pasando". Estas situaciones fueron contadas por las amigas de María Fernanda luego del lamentable suceso. “Tenía una obsesión con ese muchacho, y no había forma de sacárselo de la cabeza”, expresó Javier.

Pero esto no fue lo único que sus padres se enteraron por estos días, sino que supieron además que la imputada en la causa por asesinar a María Fernanda Chicco, ya la había agredido varias veces antes de lo sucedido. “La otra chica tenía una obsesión con mi hija, se quería parecer constantemente a ella. Si se sacaba una foto con una ropa, ella (la agresora) se ponía la misma ropa; María Fernanda se puso brackets en los dientes y ella también; tenía una envidia terrible”. Además José Chicco aseguró que Karen Ñ. “ya le había pegado dos o tres veces en un boliche” a su hija y que el motivo siempre era el mismo: la relación con el joven. El padre de María Fernanda expresó que conoce a la familia de “la agresora” solamente de vista, y aseguró: “El padre es un hombre laburador, no creo que le inculque esas cosas a la chica, parece una persona buena. No escuché que tenga problemas con otra gente”.

Finalmente Chicco destacó el acompañamiento de la localidad de Ceres a su familia, compuesta por su esposa y 3 hijos más (dos varones y una nena), ante la pérdida de su hija mayor. Y pidió que la responsable del asesinato reciba “la mayor condena” y que “no quede libre”.